Las acciones de un grupo de personas que responden de manera similar a un evento o situación, incluyendo personas que ocupan el mismo lugar (una multitud), así como fenómenos de masas en los que los individuos están dispersos en una amplia área (Movimientos colectivos).
Forsyth (2010, p. 502)
Conviene recordar que en inglés la expresión collective behaviour designa esos residuos que una sociología esencialmente preocupada por el orden social no llega a asimilar: comportamiento de masas, modas, agitaciones o desórdenes sociales, fenómenos de contagio, motines, histeria de masas, etc.
Dupuy (1999, p. 32)
Una colectividad que actúa con cierta continuidad para promover un cambio en la sociedad o grupo de la que forma parte.
(Turner & Killian, 1987 en Miller, 2013, p. 469)
(el cambio se realiza “desde fuera” de las instituciones)
Los senadores son todos hombres de bien, el Senado romano es una mala bestia.
Citado por Moscovici (1985, p. 26)
Es decir,
considerado aisladamente, cada uno de nosotros es en definitiva razonable; juntos, en una multitud, con ocasión de una reunión política e incluso en el seno de un grupo de amigos, estamos todos dispuestos a cometer las mayores locuras.
Moscovici (1985, p. 26)
(…) difusión del afecto o de la conducta de un participante de la multitud a otro; una persona sirve como estímulo para las acciones imitativas de otra.
Milgram & Toch (1969, p. 550)
(…) doce hombres de buen sentido y de inteligencia pueden dar un veredicto estúpido y absurdo. Una reunión de individuos puede, por tanto, dar un resultado opuesto al que habría dado cada uno de ellos (p. 17)
La muchedumbre es un terreno en el que se desarrolla muy fácilmente el microbio del mal, y en donde el microbio del bien casi siempre muere, por no encontrar las adecuadas condiciones de vida (p. 64)
Sighele (1892, p. 17 y 64)
Por su poder exclusivamente destructivo, actúan como aquellos microbios que activan la disolución de los cuerpos debilitados o de los cadáveres. Cuando el edificio de una civilización está carcomido, las masas provocan su derrumbamiento. Se pone entonces de manifiesto su papel. Durante un instante, la fuerza ciega del número se convierte en la única filosofía de la historia.
Le Bon (1895, p. 22)
En determinadas circunstancias, y tan sólo en ellas, una aglomeración de seres humanos posee características nuevas y muy diferentes de las de cada uno de los individuos que la componen. La personalidad consciente se esfuma, los sentimientos y las ideas de todas las unidades se orientan en una misma dirección. Se forma un alma colectiva, indudablemente transitoria, pero que presenta características muy definidas. La colectividad se convierte entonces en aquello que, a falta de otra expresión mejor, designaré como masa organizada o, si se prefiere, masa psicológica. Forma un solo ser y está sometida a la ley de la unidad mental de las masas.
Le Bon (1895, p. 27)
Mecanismo | Fenomenología | Conducta |
---|---|---|
Anonimato | Invencibilidad, irresponsabilidad | |
Contagio | Cambios de conducta rápidos e impredecibles | Violenta, antisocial, incivilizada |
Sugestibilidad | Afloran los instintos primitivos, salvajes |
Resulta completamente ocioso discutir si una sociedad debe ser o no debe ser constituida con la intervención de una aristocracia. La cuestión está resuelta desde el primer día de la historia humana; una sociedad sin aristocracia, sin minoría egregia, no es una sociedad.
¿Cuál es, pues, la condición suma? El reconocimiento de que la misión de las masas no es otra que seguir a los mejores, en vez de pretender suplantarlos. Y esto en todo orden y porción de la vida.
Ortega y Gasset (1922)
Cuando la masa actúa por sí misma, lo hace sólo de una manera, porque no tiene otra: lincha. (…) Ni mucho menos podrá extrañar que ahora, cuando las masas triunfan, triunfe la violencia y se haga de ella la única ratio, la única doctrina.
Ortega y Gasset (1930, p. 118)
“Si en la masa el hombre es un lobo, la mujer es una hiena. La hiena es la violencia en femenino. Animal que se alimenta de carroña, es asocial e inmundo, como el sexo al que representa y al mismo tiempo puede ser un animal feroz.”
Gallini (1988, p. 118 [hablando de Sighele])
Blumer, H. G. (1939). Collective Behavior. In A. M. Lee (Ed.), New Outline of the Principles of Sociology (Second, pp. 167–222). New York: Barnes and Noble.
Dupuy, J.-P. (1999). El pánico. Barcelona: GEDISA.
Forsyth, D. R. (2010). Group dynamics (5th ed). Australia ; Belmont, CA: Wadsworth, Cengage Learning.
Gallini, C. (1988). Scipio Sighele et la foule délinquante. Hermès, (2), 105–133.
Giné, J. P. (1978). El temps de les cireres.
Le Bon, G. (1895). Psychologie des foules. Paris: Presses universitaires de France.
Milgram, S., & Toch, H. (1969). Collective Behavior: Crowds and Social Movements. In G. Lindzey & E. Aronson (Eds.), Handbook of social psychology. Vol. 4, Group psychology and phenomena of interaction (pp. 507–610). Reading (Mass.): Addison-Wesley.
Miller, D. L. (2013). Introduction to Collective Behavior and Collective Action (Third). Long Grove, IL.: Waveland Press.
Moscovici, S. (1985). La era de las multitudes. Un tratado histórico de psicología de las masas. México: Fondo de Cultura Económica.
Ortega y Gasset, J. (1922). España invertebrada: Bosquejo de algunos pensamientos históricos (2nd ed). Madrid: Espasa-Calpe.
Ortega y Gasset, J. (1930). La rebelión de las masas. Madrid: Tecnos.
Sighele, S. (1892). La Foule Criminelle. Essay de Psychologi Collective (2nd ed.). París: Félix Alcan.